Meditar: ¿Para qué?

Meditar: ¿para qué? Hoy en día son muchas las instituciones y academias, más o menos reconocidas a nivel internacional, que proponen cursos de meditación o una introducción a esta practica milenaria. Inclusive la ciencia y la neurologia han empezado a interesarse a los efectos de una practica meditativa constante, intentando estandardizarlos o describirlos mediante parametros objetivos o por lo menos facilmetne medibles con los instrumentos y metodos cientificos.

Pero, de que se trata exactamente y ¿cuales beneficios puede aportar la meditación?

La meditación es una práctica en la cual el individuo entrena su mente para conseguir un determinado estado de conciencia o algún beneficio. El término meditación puede referirse a un amplio espectro de prácticas y tecnicas de que incluyen relajación, construir energía interna o fuerza de vida (Qì, ki, chi, prāṇa, etc.), desarrollar compasión, amor, paciencia, generosidad y perdón entre otras cualidades.

Distintas tradiciones espirituales proponen la meditación como una disciplina relevante en sus prácticas. He aquí una muestra.

Jeanne de Salzmann – Discípula de Gurdjieff

Ella llamaba a la meditación de dos formas: “Sentarse” y “Trabajo en silencio”. En el libro Heart without measure de Ravi Ravindra, este hace un recuento de la insistencia de Madame de Salzmann de meditar. Después vendría el trabajo físico y los movimientos. “Hay que estar abiertos y disponibles” recomendaba a Ravindra.

“Quizá por eso hay un gran énfasis en el Trabajo acerca del movimiento de energía en el cuerpo durante la meditación” (op. cit. pág. 143)

“Durante el trabajo en silencio, sentí y entendí lo que los primeros Cristianos pudiesen haber querido decir en su plegaria Maranatha (Ven Señor)” (op. cit. pág. 182)

Gueshe Kelsang Gyatso – Maestro de la tradición budista Kadampa

Es un prolífico traductor viviente de las enseñanzas de Buda que continúa la tradición Kadampa fundada por el monje hindú Atisha y es parte del budismo Mahayana. En su libro “Manual de meditación: Meditaciones para una vida feliz y llena de significado” instruye qué como preparación, se lee algún sutra o tema de contemplación. Posteriormente, se asume una cierta postura con la espalda recta y con ojos levemente abiertos se procede a seguir la respiración.

“La meditación es la mente que se concentra en un objeto virtuoso, y es la causa principal de la paz mental” ((op. cit. pág 6)

“Con solo practicar la meditación en la respiración durante diez o quince minutos al día, podremos reducir nuestro estrés” (op. cit. pág. 11)

“Si deseamos de verdad lograr la experiencia de las etapas del camino, debemos meditar a diario” (op. cit. pág. 21)

Primeros padres Cristianos

Existe un paralelismo extraordinario entre lo que los budistas llaman el: “objeto virtuoso” y lo que los padres del desierto llaman contemplación. Douglas Burton-Christie escribió un detallado libro intitulado: “La palabra en el desierto: La escritura y la búsqueda de la santidad en el antiguo monaquismo cristiano”

“Abba Lot describe su rutina ascética…: Digo mi pequeño oficio, ayuno un poco, rezo y medito, vivo en paz en la medida que puedo, purifico mis pensamientos” (op. cit. pág. 120)

“Observa tus pensamientos, y cada vez que ellos empiecen a decirte algo, no les contéstes” (op. cit. pág. 120)

“Medita en el Evangelio y las otras Escrituras, y si surge en ti un pensamiento, no lo mires nunca” (op. cit. pág. 122)

Meher Baba – Filósofo Sufí

En una recopilación de los Discursos editados por Allan Y. Cohen, cita a Baba como parte de la tradición sufí.

“Puede ser relevante mencionar que las personas en los países occidentales modernos parecen tener una gran dificultad para encontrar en tiempo, la oportunidad o la concentración necesaria para meditar. [….] …mantén la meditación integrada y balanceada con el resto de tu vida” ((op. cit. pág. 11)

“Otra cosa acerca de la meditación es que literalmente debe ser sostenida por interés. Tienes que tener interés en la cosa sobre la que meditas. La meditación es una suerte de ayuno de la mente, en la misma forma que tu cuerpo ayuna cuando dices: Solo pensaré en esta única frase, o esta única persona o esta única cosa” (op. cit. pág. 56)

“El proceso de meditación invita muchos pensamientos absurdos y no deseados” (op. cit. pág. 57)

Joe Dispensa – Neurofisiólogo

“Deja de ser tú” es el libro donde expone en forma exhaustiva lo que sucede al cerebro con la meditación.

“La meditación nos permite cambiar el cerebro, nuestro cuerpo y nuestro estado del ser. (op. cit. pág. 171)

“Por medio de la meditación podemos instalar el hardware neurológico necesario, al igual que aquellas personas que cambiaron al tocar el piano o ejercitar los dedos mentalmente” (op. cit. pág. 171)

“Al producir una y otra vez ese estado mental, se volverá habitual en ti y estarás creando nuevos circuitos” (op. cit. pág.)

Rumi – Poeta y místico

Tu pensamiento es como un camellero

y tú eres el camello:

te lleva en todas direcciones bajo su amargo control.

En sintesis, podríamos resumir los efectos de la meditación, con las palabras de Patrizio Paoletti: La condición del ser humano es de instabilidad, es un pendulo que constantemente oscila desde el más al menos. Con la meditación, podemos reducir esta oscilación.

¡Buena meditación, entonces!